miércoles, 15 de diciembre de 2010

INMORTAL

Pabli este cap va dedicado para ti, tu tambien me haces reir bastante jaja XD ¬¬ graxx x todo ♥

INMORTAL

La inmortalidad es un don que tiene una doble capacidad de enloquecerte y serte útil. Por un lado, esta ese camino, interminable, en el cual puedes aprender, vivir y disfrutar. Por el otro, están esas personas que solo podrán acompañarte unos pasos, para luego abandonarte, dejando su huella y un dolor que te sofoca, pero que no te destruye, pues la muerte jamás te alcanzará.

Pabli Sanz.


Reflexionar es parte de la vida, y pensar en todo lo que me había pasado me llevo a dos conclusiones: que las adversidades son obstáculos que se colocan en tu camino para que los superes y te hagas mas fuerte para afrontar peores, y que si lo haces con ayuda de tu familia es aun mejor, porque te lleva no solo a superarte a ti, sino también al grupo; y la segunda, que las cosas buenas que pasan llegan solas y es mejor dejar que lleguen en el momento inesperado a pasar toda una eternidad esperándolas.

La visión de Alice en cierto modo fue desconcertante, daba mucho que pensar, Edward dijo que su hermana había visto a los vampiros luchando con nosotros, pero luego la visión desaparecía, el futuro que ya estaba asegurado era que ellos vendrían la decisión ya se había tomado, nuestro gran enigma era ¿Qué querían esos vampiros?, simples tierras no era la respuesta, de todos modos pensamos que con Edward aquí cuando lleguen, eso seria muy fácil de averiguar, y con Bella sus dones eran nulos, había practicado con su don hasta hacerlo mas poderoso a tal punto que ahora puede cubrir el triple del terreno que cubría al principio, era imposible que nos hicieran daño alguno, sin embargo la visión de Alice no daba respuesta ni seguridad a nuestras teorías, dejándonos en un punto ciego al no saber con que nos enfrentaríamos.
Estuvimos hablando toda la noche acerca de eso, la visión de Alice tampoco nos daba un tiempo, no sabíamos cuando llegarían porque aun no lo habían decidido, lo único que sabíamos era que vendrían, eso nos hizo cuestionarnos aun más las posibilidades de que su presencia aquí se debía a otra cosa.

-Aun sigo sin entender todo esto- dijo Emmett, expresando su confusión al asunto.

-No eres el único, créeme, yo tampoco entiendo- le dije, estaba intentando buscarle lógica, pero ningún camino me llevaba a una idea factible y razonable.

-Si ninguna tiene sentido Tanya- me dijo Ed al leer mis pensamientos, le saque la lengua en respuesta, a veces el y yo nos comportábamos como niños.

-Alice ¿no puedes ver nada más?- le pregunto Carlisle, que se frotaba las sienes.

-No, aun no deciden cuando venir, tengo la impresión de que saben que estamos aquí- dijo la vampiresa, parecía una pequeña duendecilla, algo frustrada por no poder ver nada, y con el seño fruncido, pero aun así hermosa.

-Eso es imposible, la única forma de que sepan que están aquí es que nos espíen, y eso lo sabríamos si así fuera- dijo Eleazar que miraba hacia la ventana, una mirada perdida, como si mirara mas allá del horizonte que tenia en frente.

-Si tienes razón- dijo Bella apoyando su idea, que estaba apegada a Edward, y este inconcientemente tenia su mano fuertemente agarrada como si intentaran separarlos y ellos se aferraran entre si, era hermoso verlos, se podía sentir como irradiaban amor, una pareja realmente enamorada que duraría eternamente, Edward sonrío por mi pensamiento.

-¿Qué haremos entonces?- pregunte.

-Por ahora esperar a ver que pasa, y esperar que se decidan, estaré revisando su futuro para ver si me llega una nueva visión- me respondió Alice, le sonreí y asentí.

-Agradezco que estén haciendo esto por mi, chicos.

-No tienes que agradecer Tanya, para eso es la familia- me dijo Carlisle con una amplia sonrisa, a la que correspondí.

-Bueno saben que están en su casa, siéntanse cómodos, yo regreso ahora- dije y Salí corriendo a mi habitación.
Estaba exactamente igual que cuando me fui hacia un mes, mi cuarto era como mi santuario en el que era yo misma, en el que me sentía en privado, y en paz, lo observe, como si fuera la primera vez que lo viera, mire mi cama matrimonial, enorme, ocupaba gran espacio en mi habitación la cabecera de esta tenia un estilo colonial, de la época de antes de Cristo, me gustaba conservar ese estilo perdido, desconocido por el mundo, mi cuarto tenia una gran ventana de vidrio que ocupaba casi la totalidad de la pared del lado izquierdo de la habitación, desde ahí podía mirar el patio trasero de la casa y hacia el horizonte, del lado izquierdo de la cama había una puerta que daba a mi closet, del mismo tamaño que mi habitación, y en frente había otra puerta que daba hacia mi biblioteca personal, adoraba leer por eso tenia una en mi habitación, era casi del mismo tamaño que mi habitación solo un poco mas pequeña, tenia muchísimas colecciones de libros, incluso de escritores que jamás se dieron a conocer al mundo o obras extraviadas en el paso de los años, es impresionante la cantidad de escritores que han existido en tantos años y que el mundo no conoció jamás, mis obras eran desde Homero hasta los escritores mas actuales, también en mi biblioteca tenia una computadora que usaba muy poco sin embargo era de ultima tecnología, no la usaba porque no necesitaba buscar nada en ella, toda la información que quisiera saber ya la tenia retenida en mi mente. Mire la chimenea que tenia al frente de la cama, la tenia por decoración, en una casa normal en Alaska cualquier cuarto la tendría, esa chimenea me gustaba, y le daba un lindo toque al lugar, estaba decorada a mi estilo, arriba de la chimenea había un gran cuadro en donde estaban retratados todo mi clan, incluyendo a Sasha, Irina, Carmen y Eleazar, el cuadro original era solo mis hermanas y Sasha, pero lo mande a actualizar incluyendo a Carmen y a Eleazar, el único que faltaba ahí era Garret, que era nuevo miembro de la familia, Vasili, no lo conocí nunca, solo cuando iba a morir, y Laurent fue considerado parte de nuestro clan por un tiempo mientras estuvo con Irina, pero después se fue y no regreso; mirar ese cuadro me hizo recordar aquel día en el que mi hermana se fue, y recordar a mi madre, conserve el cuadro para recordar a mi clan completo siempre, a Sasha y a Irina siempre las recordaría, uno de los defectos de ser inmortal, llevar contigo siempre en la memoria el dolor de perder a un ser querido, mi dolor se intensificaba aun mas cuando recordaba la causa de la muerte de esas dos vampiras, en cierto modo sentía que las traicionaba, la familia que una vez les dio muerte ahora era mi familia, es como si me aliara con el enemigo, me sentí aliviada al pensar que Alec no había participado en ello, pero imaginarme tan solo que si el hubiera estado ahí y Aro le hubiera ordenado…no podía ni siquiera formar esa idea en mi cabeza, el dolor que me provocaba era tan intenso, que no tenia palabras para describirlo.
Camine hacia la ventana y suspire, decidí pensar en otra cosa, mire el cielo, ya estaba muy entrada la noche, era luna llena, está brillaba intensamente y junto a ella las estrellas, distinguí mi constelación, muy a lo lejos, y recordé lo que me había dicho Alec en el claro, que estábamos mirando el mismo cielo, el mismo firmamento, sonreí, amaba a ese vampiro, demasiado, saque el teléfono de mi bolsillo, y pensé en llamarlo, pero luego dudé, me quede mirando la pantalla del celular, que se encendió de pronto, abrí mis ojos como platos, y me sobresalte al ver el numero.

-Hola- respondí, esperando a que hablara.

-Hola mi amor ¿Cómo estas?- dijo, y en mi rostro no pudo evitar formarse una enorme sonrisa, escuchar el sonido de su voz era como el coro de los Ángeles para mi.

-Alec, mi amor, ¿bien y tu?-respondí.

-Extrañándote- rió- ¿Cómo están tus hermanas?- sabía que esa no era la pregunta, el quería saber que era lo que había pasado.

-Mis hermanas están bien, por suerte, pero creo que tendré que quedarme más de lo que pensé- dije sin rodeos.

-¿Por qué, que ha pasado?- pregunto preocupado.

-Unos vampiros nos están buscando pelea- reí- quieren nuestro territorio- le explique.

-¿Vampiros, que vampiros, como que su territorio?- pregunto.

-Unos vampiros, son cuatro, el problema es que son muy fuertes, tienen dones, y mi clan no es tan poderoso-dije, evitando la pregunta del territorio, no quería explicarle aun mis sospechas, no quería que se preocupara- claro, que pedí ayuda- aclaré.

-¿A quien?

-A los Cullen por supuesto- dije como si fuera algo obvio.

-Mi amada, ¿Cómo así que su territorio?- la pregunta del millón, yo no conocía la respuesta, y tampoco quería dársela cuando la supiera.

-No lo se mi amor, yo no comprendo mucho la situación, pero con Edward aquí será fácil de saber en cuanto lleguen- no me pareció prudente nombrar a Edward, pero luego recordé que Alec no sabía que alguna vez yo había sentido algo por él.

-En cuanto sepas algo me avisas ¿si?- me dijo, con tono preocupado, pero a la vez aliviado.

-Claro mi amor- dije, Kate se asomo a la puerta indicándome que viniera, le hice amago de que esperara- Alec debo irme, te amo- me despedí.

-Y yo a ti, te amo cuídate mi Tanya- sonreí aun más, adoraba que me dijera así, me sentí como una adolescente que conoce el amor por primera vez.

-Adiós, mi Alec- concluí y colgué.

-Dime Kate- dije arqueando una ceja.

-Nada, solo quería hablar contigo- dijo algo tímida por haberme interrumpido, me acerque a ella y la hice pasar, cerrando la puerta, la tome de la mano y la conduje hasta mi cama, me senté e hice amago para que se sentara, ella asintió y se coloco junto a mi.

-Dime hermana- le sonreí para compensar mi descortés comportamiento.

-Bueno yo…quería saber si tu…si Alec…-la note nerviosa al preguntar- si tu y Alec…

-Kate, pregúntame lo que sea- dije para infundirle ánimos.

Ella suspiro y me miro a los ojos, entendí que lo que me preguntaría no seria algo fácil de responder- es que quería saber si Alec de verdad te quiere y si te quedaras a vivir definitivamente en Volterra.
La pregunta me callo como una bomba, me quede en shock con los ojos en blanco, pero me recompuse enseguida.

-Hamm, si claro que me quiere, puedo sentirlo, puedo verlo en sus ojos- le dije, sin responder la otra pregunta.

-¿Y te quedaras allá definitivamente?, no es que te este presionando- dijo y coloco una mano en mi hombro- se que lo quieres y no te culpo si quisieras irte, lo que sucede es que siento que ya he perdido demasiadas personas importantes y que quiero mucho, tu eres mi hermana, mi amiga y la líder del clan, y no quisiera que se perdiera eso, solo no quiero que te alejes de mi.

Su confesión me dejo devastada, y el sentimiento de culpa lleno mi ser, quería llorar, tenia razón en lo que decía, yo tampoco quería abandonarlos, eran mi clan, mi familia, pero también quería a Alec y no deseaba estar lejos de él.

-Kate, yo no lo se, esa es una decisión que debo tomar con la “cabeza fría”-dije esa frase como algo no literal- no se que es lo que Hare aun, pero yo jamás, jamás los abandonaría, ustedes son mi familia y eso no pasara.

-te quiero Tanya- dijo y me abraso, yo correspondí  a su abrazo, adoraba a mi hermana, y no la abandonaría por nada del mundo.

-Bueno-se alejo un poco de mi- debo irme-dijo y se fue de la habitación, típica Kate, sonreí.
Mire hacia el amanecer que se aproximaba, y me puse a pensar en lo que Kate me había dicho, jamás en mi existencia se me había pasado por la mente dejar mi clan, pero ahora las cosas eran diferentes, porque ahora estaba enamorada, y mi corazón deseaba estar al lado de la persona que quería, pero eso implicaba dejar parte importante de mi en otro lugar, y no quería abandonar eso, tenia perfectamente claro que Alec no dejaría a los Vulturi por venir a Denali conmigo, y lo entendía seria como estar en mi misma situación, pero tampoco dejaría a mi familia, decidir lo que haría no sería sencillo, podría estar con Alec en Volterra un tiempo, pero no definitivamente, decidirlo sería lo mas difícil que tendría que hacer en toda mi existencia, pero no lo decidiría ahora, mi mente en este momento estaba en cosas mas importantes, los vampiros nómadas.
Camine hasta las escaleras y baje a la estancia, ahí estaban Edward, Bella y Alice, termine de bajar y me senté en frente de ellos.

 -Alice, disculpa si te presiono, pero ¿no has visto nada más?- le pregunte.

-No, aun no se deciden, no te preocupes Tanya, en cuanto sepa algo serás la primera en saberlo- dijo mirándome.

-No es cierto, será la segunda- dijo Edward divertido, mirando a Alice y luego a mi, yo me eche a reír al igual que Alice y Bella- Tanya- dijo después de reírse- no pude evitar escuchar lo que pensabas, me gustaría ayudarte en lo que pueda- dijo, y Bella se sentó al lado de Alice, como para hacer que nuestra conversación fuera algo “privada”.

-Gracias Ed, se que me ayudaras si te lo pido, pero esto es algo que debo decidir sola, nadie puede ayudarme.

-Lo se, es una difícil decisión- dijo y se acerco a mi- y más cuando debo hacerlo entre mi familia y Alec- pensé, no quería que me escucharan los demás, Edward asintió.

Me coloque una mano en la cabeza como si la sostuviera y me recosté en el brazo del mueble.

-¿Estas aburrida Tanya?- me pregunto Edward con cara divertida, puse cara pensativa y le dije:

-Algo- y me reí, Ed, Alice y Bella se rieron conmigo.

-Después te quejas de que no hay nada emocionante en tu vida- dijo riéndose, y yo reír aun mas, ¿acaso se estaba juntando mucho con Emmett?

-Últimamente yo creo que si- me dijo, respondiendo mi pregunta mental.

-Intenta evitarlo con él basta y sobra- dije y todos se rieron, creo que entendieron nuestra conversación.

-Bella ¿y Renesmee?- pregunte, y creo que la saque de alguna ensoñación, a ella no la conocí cuando fue humana, pero estaba segura de que se la pasaba soñando, y con todavía mas seguridad podría decir que con Edward.
-Esta en casa con Rose y Esme, no quise traerla, ya sabes por si la situación se complica- me dijo sonriendo.

-Claro te entiendo- le dije, y un segundo después todos en la estancia se tensaron, no entendía porque hasta que mire a Alice, con la mirada perdida, eso significaba que tenia una visión, mire a Edward, que miraba fijo a Alice, observando el futuro que ella estaba viendo, y mire a Bella, que conocía la expresión de Alice y sabia como yo que estaba viendo algo importante.

-Alice que…-dije, pero Edward me hizo seña de que esperara, me levante de mi asiento y todos incluida Alice hizo lo mismo, esperamos un minuto mas y la vampira parpadeo, mire a Edward que tenia el pánico reflejado en su rostro al igual que el de su hermana, pero lo compusieron al verme a mi y luego a Bella.

-¿Alice que has visto?- le pregunte, pero ella no me respondía- ¡Alice!- exclame.

-Edward que…-dijo Bella, perdiendo el hilo de voz.

-Bella busca a los demás, diles que bajen- le dijo sin mirarla, ella asintió y subió escaleras arriba, yo los mire a ambos.

-¿Qué viste Alice?, dijiste que me lo dirías- acuse, estaba empezando a estresarme.

-Ya se decidieron, y vendrán mañana en la noche- dijo ella mirando a Edward.

-Y lucharan con nosotros- termino Ed.

-¿No hay nada más?- pregunte, ellos se miraron entre si.

-¿Qué ha pasado Edward?- pregunto Carlisle que venia caminando con toda la familia detrás de él.

-Alice los ha visto, vendrán mañana en la noche- declaro Ed, diciéndoles lo mismo que me había dicho hace unos minutos.

-¿Vendrán solo ellos cuatro?- pregunto Jasper.

-Si, no saben que estamos aquí seremos una sorpresa para ellos.

-¿Qué es lo que quieren?- pregunto Carlisle.

-No lo se, exactamente- dijo- pero al parecer, esperan que esta vez tu estés aquí- aclaro mirándome.

-¿Yo?, y ¿porque?- pregunte, y mi cara y mi mente se llenaron de confusión, ella se encogió de hombros.

-Mejor subamos al tercer piso y lo planeamos allá- propuso Eleazar, todos asintieron, y subieron.

-Edward, espera- le dije y lo tome del brazo, prácticamente arrastrándolo fuera de la casa, lo suficientemente lejos como para que no nos escucharan.

-¿Qué?- me pregunto algo irritado.

-Lo siento Edward, pero te conozco se que me ocultas algo, dime todo lo que Alice vio- le dije, y el suspiro- Ed, sabes que si es sobre mi, debo saberlo.
-Hamm…- dijo como pensando.

-Edward, sabes que es verdad lo que t digo, ¿a que se refería Alice con que esperaban que yo estuviera aquí?

-Está bien te diré-me soltó, abrí los ojos como platos, no creí que accediera tan fácil. 

 -Lo se, pero tienes razón, debes saberlo, no te lo dijimos porque no se, me asuste- me dijo, respondiendo a mi pensamiento.

-¿Te asustaste?, tu no eres de esos- dije y me reí, el se río conmigo- bueno ¿y? dime.

-No lo se exactamente, lo único que se, es que ellos vienen por ti- lo mire aun mas extrañada.

-¿Por mi?, si yo no los conozco, no entiendo, ¿Qué podrían querer de mi?- estaba muy confundida.

-No lo se, mañana en la noche lo averiguaremos, pero no dejaremos que te lleven si eso es lo que quieren- me dijo, muy seguro de si mismo.

-Lo se, igual no creo que haya razón, para hacerlo, regresemos- dije y corrimos de nuevo hacia la casa, -Edward no vayas a mencionarles nada de esto, no quiero que se preocupen por mi- le dije mentalmente, el asintió, subimos al tercer piso donde estaban todos, como Jasper era el mas experimentado en el tema de los combates, lo pusimos a cargo, estuvo organizándonos toda la noche y el resto del día, coloco a Edward, Carlisle y a mi al frente, Bella y Kate estaban detrás de nosotros, a Ed no le pareció la idea de ponerla tan en frente, pero el sabía que a ella no le pasaría nada, además Bella le puso mala cara cuando empezó a quejarse y termino accediendo, después de ellas estarían Alice y Jasper, y por ultimo detrás de ellos estarían Carmen, Eleazar, Garret y Emmett, este ultimo no tan contento por estar tan atrás, como siempre, Emmett queriendo enfrentarse a varios vampiros. Jasper nos explicaba, lo que haríamos, pero yo le preste muy poca atención, el día se me hizo eterno, y mi cabeza estaba vuelta un desastre, tenía mis pensamientos en tres cosas importantes, el primero se centraba en Alec, lo extrañaba, y quería estar a su lado; el segundo era en la importante decisión que debía tomar; y el ultimo se centraba en mi, en lo que podían querer esos vampiros de mi.

El día sin embargo paso rápido, nos ubicamos en el claro donde Alice los había visto llegar, y esperamos a que el futuro se volviera presente.

-¿Alice cuando se supone que deben llegar?- le pregunto Carlisle.

-En unos minutos más o menos- le respondió ella.
Todos esperamos en silencio, miraba al horizonte, donde se suponía que debían aparecer, en lo único que podía pensar en ese momento era en lo que Edward me había dicho, no terminaba de entender que era lo que querían de mi, pero faltaba poco para averiguarlo.

-¿Puedes escucharlos?- le pregunte a Edward, el negó con la cabeza.

-Se acercan- dijo Alice, y todos volteamos a mirar por donde se suponía que saldrían, y entonces los divise, eran cuatro, justo como Alice había dicho, dos mujeres y dos hombres, la primera de ellos era de baja estatura, de cabello negro largo y liso hasta la cintura, vestía una ropa tipo nómada, y llevaba los pies descalzos, sus ojos al igual que los del resto eran rojos escarlata, intensos y amenazantes, el chico que estaba a su lado era mas alto, su cabello también era negro, el vampiro era realmente apuesto, al igual que la chica de pelo negro, la vampiresa que estaba a su lado era rubia, su cabello rizado era más corto que el de la otra, y era muy hermosa, el ultimo, un poco mas bajo que el otro vampiro tenia el cabello color castaño, al igual que los demás andaba descalzo, se detuvieron a cinco metros de donde estábamos nosotros, estaban sorprendidos de ver a mas vampiros de los que esperaban, observaron a todos, para fijar su mirada en mi, intente evitarla, pero era muy difícil.

-No esperaba más vampiros hoy- hablo el más alto de ellos- tu debes ser Tanya- dijo y me miro, yo me sobresalte, ¿conocía mi nombre?

-¿Qué es lo que quieren?- pregunte sin rodeos, no le pregunte lo de mi nombre, esperaba obtener respuesta de Edward.

-Y ustedes deben ser los Cullen- dijo mirando a Carlisle.

-¿Cómo es que sabes de nosotros?- le pregunto.

-Ustedes están en boca de todo el mundo vampirico, todos conocen de ustedes, y que son familia de los Denali- explico, estos vampiros conocían más de lo que pensábamos, y no se me pasaba la más minima idea de una explicación coherente para esto.

-Responde mi pregunta, ¿Qué es lo que quieren?- lo mire desafiante, y él solo sonrío.

-Tanya vete de aquí- me susurro Edward, tan bajo, que tuve que hacer un esfuerzo para escucharlo, negué con la cabeza- ¿Por qué?, no me iré- le dije mentalmente.

-Hazme caso- volvió a susurrar, y yo volví a negar con la cabeza.

-Lo que quiero, es solo una cosa- dijo y miro hacia atrás haciéndole señas a los otros tres, que salieron corriendo en varias direcciones al igual que él, mire a Edward y el parecía igual de confundido.

-Que rayos…-dije, pero no termine la oración, la voz de Emmett y Garret me hicieron callar.

-Vamos- le grito Emmett a Garret, y los dos salieron corriendo en la dirección en la que se había ido la vampira rubia.
-Emm, Garret, vuelvan acá- grite, pero ellos ya se habían ido.

-¿Qué es lo que intentan?- pregunto Jasper.

-Atacarnos en grupos pequeños, saben muy bien que no podrán contra once de nosotros, aun con sus dones- explico Edward.

-ya Emmett y Garret se dividieron, tendremos que hacer lo mismo- dijo Jasper.

-OK, Bella, Kate y Tanya, ustedes vienen conmigo-anuncio Edward, e hizo que lo siguiéramos, corrimos varios kilómetros, siguiendo el rastro del vampiro mas alto que se había ido hacia el noreste, seguimos su olor hasta otro pequeño claro, su aroma inundaba todo el lugar, él estaba ahí, pero se escondía.

-Esta aquí ¿no?- dije y Ed asintió, de repente me encontré sola en el claro, mire a todos lados y ni Bella, ni Kate ni Ed estaban por ningún lado, en mi mente quedaba un poquito de conciencia, para saber que estaba viendo una ilusión, intente sacar de mi mente al vampiro, pero no pude, hasta que escuche que me llamaban.

-¡Tanya!- grito Kate, yo sacudí mi cabeza, y me di cuenta de que estábamos siendo atacados por tres de los vampiros, me dispuse a correr pero la vampira de cabello negro se me atravesó entre mis amigos y yo, la mire de arriba á abajo y corrí hacia ella, demasiado rápido como para que reaccionara, la tome por la cintura y la lance, ella choco contra un árbol, haciendo que este se derribara por completo, la ignore y avance hacia donde estaban los demás, que ya habían provocado daños en los otros vampiros, para mi mala suerte huyeron.

-Son unos cobardes- dije, y los demás se rieron.

-Más bien yo diría astutos, enfrentarse a nosotros seria la estupidez más grande que pudieran cometer- comento Edward, y yo no pude evitar reírme.

-Regresemos- propuse, todos asintieron, y se dirigieron en la dirección hacia donde estaba el primer claro.
Todos, excepto Emmett y Garret estaban ahí, pero llegaron unos segundos después de nosotros.

-Acabamos con ella- dijo Emm riendo y chocando la mano con Garret.

-No fue fácil, pero lo hicimos- dijo, señalando la humareda que se levantaba, a lo lejos.

-¿Se fueron?- pregunto Carlisle.

-Si, pero regresaran- dijo Alice.

-Edward, ¿supiste que es lo que quieren?- le pregunte, y todos repararon su mirada en él.

-No mucho, Elisha, Carolina y Sebastian no sabían exactamente lo que hacían aquí.

-¿Así se llaman?- pregunte, él asintió.

-El más alto de ellos, el que habló, se llama Kevin, es el único que sabe, pero no pensaba mucho en eso, sabe que hay un vampiro que lee mentes, pero no sabe quien es.

-¿Qué es lo que pensaba el tal Kevin?- pregunto Carlisle, quitándome la palabra de la boca.

-No mucho, lo único que pensaba era en conseguir a Tanya de cualquier forma, al parecer solo trabaja para alguien un tal Friedrich- dijo y me miro expectante.

-¿Friedrich?, yo no conozco a nadie con ese nombre- dije, y me confundí mas aun de lo que ya estaba, ¿Quién es Friedrich?

-¿Conseguir a mi hermana?, explícate Edward- dijo Carmen.

-No se para que la quieren, solo se que para eso esta aquí- le dijo, ahora que me daba cuenta, yo tenia razón, y ellos no estaban aquí por simples tierras, por lo menos que me quisieran tenia más sentido, pero solo en el motivo. Todos me miraron, con preocupación.

-Volverán en pocos minutos, y con muchos más, además ahora están enojados porque mataron a la rubia-dijo Alice mirando a Emmett y a Garret- no solo vienen por Tanya, sino a acabar con el resto.

Me invadió la preocupación y el miedo, si ellos me querían a mi, no iba a dejar que lastimaran a mi familia.

-¿Tanya que vas a hacer?- me pregunto Edward al leer mis pensamientos.

-Lo que deba hacer, no dejare que ustedes salgan lastimados por mi causa.

-Eres nuestra familia, nosotros queremos ayudarte Tanya- me dijo Carlisle.

-Lo se y lo agradezco, pero en esto no, no dejare que los lastimen.

-¿Hermana que harás?- me pregunto Kate, pero yo no le respondí, el aroma de los tres vampiros y otros varios mas inundo mi nariz, y me voltee para encontrarme con un gran grupo de ellos a quince metros de nosotros, mi familia retomo posiciones de inmediato, yo avance y quede en la mitad de los dos grupos, el vampiro, el que correspondía al nombre de Kevin, me miro expectante.

-Si me quieres a mí, aquí estoy, pero a mi familia déjala en paz- solté, no sabía que era lo que estaba haciendo, pero no tenía mucho que perder, me conformaba con haber estado con Alec el tiempo suficiente, si debía abandonar este mundo, abandonarlo, no morir, porque muerta ya estaba hace muchos años; me sentiría feliz de irme, y lamentaba no haber cumplido la promesa que le hice a Kate, pero esto estaba fuera de mi control. Escuche como Kate y Carmen se alarmaban y avanzaban con paso sigiloso más cerca de mí.

-¿En serio?- me pregunto el vampiro, yo asentí.

-primero que se vallan ellos- dije señalando al resto de los vampiros que se encontraban detrás de él.

-¿Cómo se que no me mientes?- me pregunto.

-Te estoy hablando en serio, una Denali nunca incumple su palabra- le dije en tono totalmente serio, mi intención no era engañarlo, el me observo con detenimiento y les hizo señas a los otros para que se fueran, entre gruñidos y quejas lo hicieron y solo quedaron los tres vampiros, Kevin se acerco a mi e hizo que caminara hacia donde estaban los otros dos.

-¡Hermana!- grito Kate, no quería voltear, pero tuve que hacerlo, Garret la sostenía para que no saliera corriendo, al igual que Eleazar a Carmen, en sus rostros estaba reflejado el dolor, mire a cada uno de ellos, se debatían entre la pena y la confusión, mi mente se encontraba en blanco en ese momento, no sabía que hacer, decir o reaccionar, lo único que pensaba era en su bienestar y en Alec, el amor de mi existencia.

2 comentarios:

  1. ooo esta buenisimo me encantoo yia kiero k salga el sigiente capitulo estoy muy ansiosa ojalas salga lugo :D gracias por escribir besos k estes bien bye!!!

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